Dr. Yotin Pérez: «Deficiencia de hierro en el embarazo está asociada con TDA, TDAH en niños y otros daños materno-fetales»

Punta Cana.- De acuerdo con el doctor Yotin Ramón Pérez, ginecobstetra especializado en embarazos de alto riesgo, las mujeres que toman suplementos de hierro durante el embarazo tienen cambios menos pronunciados en la hemoglobina, ya que aumentan su masa de glóbulos rojos de manera más proporcional que aquellas que no toman suplementos hematínicos.
Y es que, durante la gestación, se requieren1,000 mg de hierro necesarios para el embarazo normal. 300 mg se transfieren activamente al feto y a la placenta. Otros 200 mg se pierden a través de varias rutas de excreción normales, principalmente el tracto gastrointestinal.
En el marco del I Congreso Internacional de Ginecología y Obstetricia del Cibao, Pérez dirigió la conferencia ‘Anemia en embarazadas: Más allá de lo fisiológico’, una charla en la cual explicó que la pérdida de sangre menstrual es probablemente el principal factor que influye en el equilibrio de hierro en el cuerpo y es la causa más común de anemia por deficiencia de hierro en las mujeres premenopáusicas.
La anemia consiste en la disminución de la masa total de eritrocitos o volumen que ocupa la suma de todos los glóbulos rojos de una persona. En la práctica clínica se utilizan para el diagnóstico las denominadas “medidas de concentración”, como el recuento de hematíes, el hematocrito o el valor de hemoglobina, considerado este último el parámetro de mayor exactitud, explicó el especialista.
Asimismo, el ginecobstetra detalló que la ferropenia o deficiencia de hierro se define como el agotamiento de las reservas medulares de hierro, con signos de un suministro limitado de este elemento a los tejidos. Por lo tanto, puede existir ferropenia o deficiencia de hierro, sin anemia, considerándose ambas dos entidades clínicas estrechamente relacionadas, pero independientes entre sí.
Durante el desarrollo del feto, el hierro es necesario para la neurogénesis correcta y para el desarrollo y mielinización neuronal. En cambio, la deficiencia de hierro durante períodos críticos, antes y después del nacimiento, puede provocar efectos de un desarrollo neurocognitivo alterado difíciles de remediar que pueden persistir en la adultez, detalló Pérez.
En ese sentido, la DH/AF inhibe el desarrollo motriz, emocional, la memoria (hipocampo) y, con ello, el aprendizaje. Además, el parto pretérmino está asociado a un retraso en el desarrollo fetal que puede derivar en el retraso del desarrollo neurocognitivo.
Al respecto, Pérez explicó que las personas expuestas a DH perinatal tienen un mayor riesgo de no alcanzar metas educativas en etapas posteriores de la vida. De ahí que «toda mujer con DH con o sin anemia, debe recibir Tx. con hierro», sostuvo el especialista.
Para ello, la terapia con hierro oral constituye la primera línea de tratamiento; sin embargo, no siempre es efectiva especialmente, en el embarazo y en el sangrado uterino abundante, cuando el objetivo terapéutico debe ser, reponer tanto la cifra de hemoglobina como los depósitos de hierro, aclaró Pérez.
Del mismo modo, la terapia con hierro intravenoso debe incluirse en las Guías nacionales para el manejo de DH y ADH , sobre todo en todas las mujeres en edad reproductiva, embarazo y el período posparto, puntualizó el ginecobstetra.