MSK Cancer Center alerta sobre mayor incidencia de cáncer de próstata en hombres hispanos
New York.- El Memorial Sloan Kettering Cancer Center (MSK) destacó que el cáncer de próstata es uno de los tipos de cáncer más comunes entre los hombres hispanos, haciendo un llamado a tomar medidas preventivas y enfatizando que la mayoría de casos crece lentamente, detectándose nueve de cada diez cuando aún están confinados a la glándula prostática gracias a los avances en detección, tratamiento y educación.
El centro oncológico identificó que el mayor factor de riesgo es la edad, pero también influyen los antecedentes familiares, la raza y los rasgos hereditarios. Reveló que los hombres hispanos tienen un 18% más de probabilidades de padecer cáncer en comparación con los no hispanos, pero un 62% menos de probabilidades de recibir tratamiento, lo que subraya la importancia de las pruebas de detección tempranas y la concienciación sobre los factores de riesgo.
MSK recalcó que muchos hombres no experimentan síntomas inicialmente, y cuando estos aparecen, suelen manifestarse tarde e incluir cambios urinarios o dolor en la parte baja de la espalda, caderas o muslos. Tener estos síntomas no significa necesariamente cáncer de próstata, pero sí indica la necesidad de evaluación médica.
El Dr. Alvin C. Goh, director de Tecnología y Educación en Cirugía Urológica Robótica del MSK, explicó: «Gracias a las herramientas de diagnóstico y tratamiento en constante evolución de MSK, el cáncer de próstata es cada vez más manejable y muchos hombres viven una vida plena y larga incluso con la enfermedad. La primera línea de defensa es asegurarse de estar informado y ser consciente de los factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollarlo, acudir a las pruebas de detección recomendadas y hablar con su médico para determinar si necesita un seguimiento adicional».
Las pruebas de detección generalmente comienzan con un análisis de sangre para medir el antígeno prostático específico durante chequeos rutinarios. Respecto al tratamiento, MSK orienta que existen diversas opciones que incluyen vigilancia activa para enfermedades de bajo riesgo; cirugía con procedimientos robóticos y mínimamente invasivos; radioterapia; y terapias sistémicas como terapia hormonal, quimioterapia e inmunoterapia para casos avanzados.
