
Santo Domingo. – Rosa Elcarte, representante en República Dominicana del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), afirmó que el número de madres y recién nacidos muertos entre el año 2020 y el 2021 es más del 80% de las muertes registradas por COVID-19, lamentó que al finalizar el año dicha taza subirá.
La funcionaria llamó la atención sobre la necesidad de darle más prioridad a otros temas que no están relacionados directamente con la pandemia y que han impacto en el bienestar de muchas personas por lo tanto resaltó la importancia de invertir más recursos en el área de la salud materna neonatal, ya que los hospitales reciben montos insuficientes para atender la demanda.
Reconoció el esfuerzo de las autoridades del gobierno para mitigar el impacto de la pandemia, sin embargo considera necesario abarcar otras problemáticas que han quedado de lado ante el virus. Enfatizó: “Si hablamos de un aumento del presupuesto de salud hay que enfocarlo donde se nos está muriendo la gente que es madres y recién nacidos y en atención primaria para evitar otras enfermedades”.
Elcarte destacó la necesidad de un mayor apego a los protocolos sanitarios y el problema de la escasez de enfermeras especializadas en obstetricia. Según sus registros la UNICEF determinó que la muerte neonatal se debe al fallecimiento de infantes en sus primero 28 la cual está vinculada a al salud de la madre arrojando que usualmente no cuentan con un chequeo regular antes del parto.